26.6.06

Danza Nocturna

Yo tenía que ir a esa comida, no tenía escapatoria. Era un deber. Conclusión, te invité.
Hace tiempo que no nos veíamos y la última vez había sido especial. Ambos lo sabíamos, nos habíamos conectado.

“Es formal” te dije “así que bien lindos nos vamos a ver”
“Ya” asentiste, con tu indiferencia que ya no me sorprende.

-La mañana en cuestión me desperté pensando en la noche -
No supe de ti hasta pasado medio día, cuando enviaste un mensaje vía celular: “cual es la hora óptima para juntarnos?”.
“La comida es a las 18:00, te espero entre 17:00 y 17:30 en mi casa” respondí escueta y dignamente.

17:00 en punto sonó el timbre.
Venías de corbata, zapatos y camisa. Pero lo que más me gustó fue tu mirada: nerviosa, pero sonriendo.
-Me gusta tu sonrisa. Me cautivan tus labios-.
Entraste a mi casa, conversamos trivialidades. No nos miramos a los ojos, quizás sólo un par de cruces, pero el ambiente aún era extraño después de la última vez.

Puntuales, 17:50 nos bajábamos del auto.
Nos encontramos con mi mejor amigo.
No conoces a mis amigos, pero nunca dudé que se iban a caer bien. Por eso te invité, sabía que no iba a tener que preocuparme de mantenerte entretenido toda la noche conversando de cualquier cosa sin importancia.
Me sentía con libertad.

La comida, de lujo. Conversamos con todos. Te perdí varias veces de vista, te encontraste con amigos, cruzábamos miradas de vez en cuando.
-Marcábamos nuestros territorios-
Te preocupaste toda la noche de que no me faltara nada. Agua, vino, jugo, cigarros, frío, calor…todo un galán. Jugando al rol.
Yo por mi parte, hice lo mío. Me crucé de piernas, te mostré el encaje de mis pantys, sonreí coqueta y fui indiferente por momentos.

Del pisco sour al vino, del vino al vodka, ron o whisky, y con eso, el baile.
La primera en la pista…yo!!! Obvio.
“Te animas?”
“Me faltan vodkas todavía para bailar” sonreíste mostrando tu vaso lleno.
“Ok, voy a estar bailando, eres bienvenido”

Nunca supe cuánta fue la dosis de vodka que necesitaste, pero llegaste a bailar. Bailamos hasta las 4 de la mañana, cuando aún quedaba fiesta, pero nosotros teníamos una fiesta personal.

Camino a mi casa…
Llegamos.
Abrí la puerta y a la vez te saqué la corbata, la camisa y voló tu cinturón.
Sé que la puerta y cortinas estaban cerradas, era mi única preocupación, no quería darle un espectáculo a los vecinos.
Entre besos, lamidas, jadeos y tropiezos te guié al living, empujándote al sillón.

Te ofrecí algo para tomar. Me miraste desconcertado.

Nos tomamos un vaso de agua cada uno…era lo que necesitaba (mos?) Puse música, te quedé mirando fijamente.

Yo, en mis tacos altos y negros. Vestido negro, muy escotado, largo y espalda descubierta.
Nos miramos un par de minutos, hasta que noté que tu respiración volvía a la normalidad.
Bajé las luces.
Uno a uno bajé los tirantes de mi vestido y lo dejé caer.
Yo, en mis tacos altos y negros, pantys de encaje y colaless que le hacía juego.
Tú sobre el sillón, con tres botones menos de tu camisa, pecho descubierto y tu virilidad asomándose a través del pantalón.

Empecé por tus pies, subiendo lentamente por las piernas… llegando a tu centro, viendo como reaccionaba. Me miras directo a los ojos, con esa cara que pide más.
Te complazco. Para eso estoy esta noche, solo para ti, lo único que tienes que hacer es pedir.


---------------------------------------------
Totalmente desnudos, en silencio. Abrazados, con los ojos cerrados, tocándonos, con suavidad, pasión. Me tomas fuertemente por la cintura, acerándome a ti.
Nuestros cuerpos recién se conocen, pero pareciera que no.
---------------------------------------------
Yo sobre ti, empezando una danza. Abrazándote con mis piernas, rodeándote, para poder llevar el ritmo, que a cada segundo se acelera.
Te guío para que toques mis pechos, invitándote a descubrirlos con tu lengua.
Me tomas por mis nalgas, y subes tus manos por mi espalda, rasguñando. Tiras mi pelo con la justa intensidad, enredando tus manos en él.

-Descubro tu cuello, huelo tu piel, lamo tu oreja izquierda; emitiendo un jadeo que te acelera-

De pie, contra el ventanal, humedeciéndolo con nuestro baile, mirándote directo a los ojos mientras nos fusionamos.
---------------------------------------------
Fuimos un solo ente, compartiendo un viaje.

Vino la calma. Miradas. Sonrisas. Silencio.

Abrazados dormimos hasta el amanecer.
---------------------------------------------------
Cuántos vodka?
Cuántos bailes?
Cuánto escote?
---------------------------------------------------
Edición: IN Conciencia

6 comentarios:

Jaime Ceresa® dijo...

Hola GaTa...
Buena historia...a veces suelen ocurrir, las tenidas formales, los tragos, todo lo demas nos llevan a noches de pasiones que atesoramos con el tiempo como un recuerdo de algo que paso.

Un beso

Francisca Escobar dijo...

qué quiere decir edición IN COnciencia?

está bueno!!!!

el comment de don chere... hmmmm... how masculine! JAJAJA

besos corro a la pega

Rocke Santeiro dijo...

TODO BIEN EH?
ME ENCANTA CUANDO LAS GATAS SACAN SUS GARRAS Y AL TERMINAR EL TRAJE FORMAL NO QUE DO BUENO NI PA TRAPERO...

WENO Y CACHONDO ... ME GUSTÓ AUNQUE FALTÓ LA ANGUSTIA...

UN BESO

escorpiona dijo...

Muy buena la danza nocturna eh :).

Un saludo

Chau

V dijo...

Te iba a preguntar = que Fca Escobar por qué IN conciencia,jaja.Suele suceder después de fiestas formales que se pierda todo tipo de formalidad,saludos!

gatagaes dijo...

Fran y Vickyta:
IN Conciencia es quien editó parte del texto.